El Ayuno Intermitente: ¿Tendencia pasajera o cambio de hábitos?

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Quizás lo hayas escuchado, puede que incluso lo hayas probado o que ni sepas de qué estamos hablando, pero sea cual sea tu caso, seguro que algo aprendes de leer el artículo de hoy: el ayuno intermitente.

El ayuno intermitente consiste en, principalmente, no comer durante un período largo del día (fase de ayuno), para juntar todas las comidas en un período más corto. 


El objetivo del ayuno intermitente puede parecer perder peso, pero no es el único beneficio que aporta esta dieta. También sirve para limpiar el intestino y dejarlo descansar, aumentar la producción de adrenalina o mejorar nuestro humor, es decir, adelgazar es un fantástico efecto secundario de la dieta, pero no es su único beneficio.

El ayuno intermitente más conocido es el 16/8, quiere decir que no comemos durante 16 horas y unimos todas las comidas del día durante las 8 horas restantes.


¿Te parece difícil?


No es el único rango. Te proponemos empezar por el 12/12 o el 14/10, que te aportarán grandes beneficios y seguramente sean más fáciles de cumplir. Existen también ayunos 24/0, pero son para situaciones más excepcionales. 


Empezar con el 12/12 es fácil, avanza un poco la cena, retrasa un poco el desayuno y ya tienes tus 12 horas, sin darte cuenta. Durante las horas de ayuno no está restringida toda la comida: el agua, café solo, infusiones sin azúcar y los caldos de verduras bajos en sal están permitidos, aunque cuando te hayas acostumbrado, ni los necesitarás. 


Lo mejor del ayuno es que si un día te lo saltas, no pasa nada, y además no te restringe a ciertos alimentos, no excluye ciertos productos de tu dieta. Eso sí, en el momento del des-ayuno, te recomendamos optar por opciones sanas: legumbres, crepes de avena con yogurt, ensalada con pescado a la plancha, etc. Si te decantas por los ultraprocesados, no vas a notar una mejoría en tu peso ni en tu salud, y además te será más difícil aguantar las horas de ayuno, por la ansiedad generada por el azúcar. 

Cada caso es diferente, y si tienes alguna enfermedad, estás embarazada o quieres hacer un ayuno intermitente de forma prolongada, deberías consultar con tu médico o nutricionista antes de realizar cualquier cambio brusco, pero en general, es una dieta apta para cualquier adulto de 18 a 65 años. 






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